El Señor Presidente y sus fabulaciones
Por Mempo Giardinelli / En la galería de Presidentes, en la Casa Rosada, no puede no figurar desde ahora mismo una personalidad emblemática por sus estudios quizá inconclusos, o sus amores caninos, o la simpatía de su sonrisa in-creíble (o sea, no creíble) y perturbadoramente original. Quien justo ayer se mandó un moco fenomenal que tiene a toda la República, y al mundo entero, en un fabuloso y originalísimo suspiro tras otro.