La campaña en silencio y la realidad a los gritos
La campaña electoral terminó antes de la fecha prevista, clausurada por un crimen dolorosísimo, pero los ciudadanos no notarán demasiado esa falta. Hace años ya que los cierres de campaña se achicaron para acomodarse al poco interés que despiertan en la sociedad las palabras de los políticos, así que las suspensiones de actos y caminatas son, más que nada, un alivio para los encargados de la logística de esos eventos, cada vez más convertidos en ocasiones propicias para sacar fotos o generar recortes de video que sean transmisibles a través de las redes sociales.