Rumores alimentan las versiones de ruidos internos
Los corrillos políticos no se toman vacaciones y están siempre atentos a los dimes y diretes que se escuchan en los cafés de la Ciudad e, inlcuso, en las playas de la Costa Atlántica. En la ocasión, por estos días volvieron a ocuparse de una relación que ya les ha dado qué hablar en varias oportunidades de 2016: el mal vínculo que mantienen Julio Garro y el senador provincial del PRO Juan Pablo Allan, que había tenido su punto más álgido cuando en noviembre pasado el Intendente pegó el faltazo al aniversario de Gonnet, una delegación a cargo de alfiles del senador. Ahora, además, hizo ruido un nuevo chisporroteo que Garro tuvo con otro delegado de Allan.