La Soberanía no se come cruda
Por Mempo Giardinelli / Con el compañero Presidente enfermo, aunque felizmente en recuperación, la situación nacional se observa grave, preocupante. La empecinada peste, con todas sus variantes llamadas cepas, no hace más que demostrar que con la sola vacuna no alcanza, ni tampoco los consejos de buena voluntad. Y que de seguir "cuidando" el turismo y la economía, si no se cierran totalmente las fronteras, esto puede ir para largo y quizás de mal en peor. Sobre todo porque las pibadas de ahora manifiestan su rebeldía con charangas y cerveza, como aquí en Resistencia este fin de semana que fue un delirante carnaval callejero. Las nuevas cepas parecen resistentes a todo y ya entraron a la Argentina de la mano de los gobernantes porteños y de sus hijos con PCRs truchos.