El caso Canicoba, una operación que pone a prueba la palabra del Presidente
Por Carlos Pagni / El oficialismo entró desde el fin de semana en un estado de excitación. La titular de la Agencia Federal de Inteligencia (AFI), Cristina Caamaño, pidió a la justicia federal que llame a declaración indagatoria a Gustavo Arribas, su antecesor durante la gestión de Mauricio Macri, por la presunción de que realizó intervenciones clandestinas en las casillas de email de dirigentes de la oposición y también de Juntos por el Cambio. El Gobierno corre el riesgo de poner de manifiesto, por el contexto en el que se realiza la presentación de Caamaño, una incoherencia que sería sorprendente. Mientras lleva a la Justicia a Arribas, Silvia Majdalani y otros jerarcas del espionaje de la administración anterior, se prepara para indultar al juez que viene desistiendo de investigar un grupo de denuncias similares realizadas tres años atrás.