Una pelea en la que nadie escucha
Por Joaquín Morales Solá / Todos hablan de todos, pero solo se oyen. Nadie escucha. La primera fase de la epidemia sorprendió con un presidente, Alberto Fernández, que asumió claramente el liderazgo de la crisis. Tomó decisiones sanitarias, como una dura cuarentena, que otros países demoraron en tomar y les está yendo muy mal. Le habló a la sociedad no como un político cualquiera, sino como un hombre común, que es lo que se propone ser. La sociedad se lo reconoció. El Presidente tiene hoy una imagen positiva que oscila entre el 60 y el 70 por ciento, según las distintas encuestadoras. No había llegado a esos números ni cuando accedió al poder, que es el instante de epifanía de cualquier presidente.